lunes, 9 de noviembre de 2015

Premios y distinciones


  • 1975 Premio de Honor Segunda Bienal Internacional de Arte de Valparaíso, Chile.
  • 1978 Primer Premio, IV Concurso Colocadora Nacional de Valores, Museo Nacional de Bellas Artes, Chile.
  • 1979 Segundo Premio de Ejecución, Concurso de Escultura Contemporánea, Torre Santa María, Santiago, Chile.
  • 1980 Segundo Premio, Concurso para el Centenario del Museo de Bellas Artes, Santiago, Chile.
  • 1982 Gana Concurso para ejecución de obra monumental en Punta del Este, Uruguay.
  • 1983 Beca del Gobierno Alemán para trabajar en el atelier Hans Worpswede, Bremen, Alemania.
  • 1986 Premio Concurso Nacional de Escultura para sede de la O.N.U., en Nairobi, Kenya, organizado por el Ministerio de Relaciones Exteriores y la Facultad de Arte de la Universidad de Chile, Santiago, Chile.
  • 1987 Primer Premio de Escultura, VIII Bienal Internacional de Arte, Valparaíso, Chile.
  •      1991 Premio de Ejecución de una de las cuatro esculturas del Edificio del Congreso Nacional, Valparaíso, Chile.
  • 1994 XI Bienal Internacional de Arte de Valparaíso, Chile.
  • 2007 Premio San Francisco otorgado por la Corporación de Amigos del Patrimonio Cultural de San Francisco, Santiago, Chile.



martes, 27 de octubre de 2015

La gira presidencial


El escultor Mario Irarrázabal tiene una larga trayectoria que lo ha llevado a explorar la mayoría de los formatos escultóricos. Desde un comienzo la preocupación del artista fue la relación de poder dentro de los individuos, así como la pérdida de la identidad con la producción en serie, todo esto dentro de composiciones volumétricas donde se desarrolla la serialidad y los elementos se relacionan dentro de jerarquías en volumen. Por esto Irarrázabal opta por las piezas en conjunto donde su mejor desarrollo producto del recorrido posible es las ejecutadas en espacios públicos.






Más sobre este artista




Documental del Escultor chileno Mario Irarrázabal. Creador de "La Mano" obra mundialmente conocida. El documental muestra la vida y obra del artista bajo un punto de vista muy estético y elegante.

domingo, 25 de octubre de 2015

Humano Mineral

La obra de Irarrázabal, presenta una gran variedad tanto en lo que respecta a la temática como en los materiales empleados, que van desde el metal, bronce, hierro, aluminio, hasta la madera, piedra y cemento. Esta variedad es fruto de una evolución artística que tuvo sus comienzos a finales de los años sesenta con la representación de figuras humanas que se distorsionan y adoptan posiciones extrañas: son vehículos de transmisión de una fuerte expresividad, resultado de su interés por temas como el amor, el sufrimiento o la muerte. La experiencia de la dictadura militar marcó un cambio en la temática, que pasó a tener mayores implicaciones sociopolíticas, cambio que desde finales de los años setenta también afectó a su estilo, que en lo formal pasó a buscar la simplificación; es entonces cuando elaboró sus célebres Manos gigantes, una serie de esculturas que ubicó en Chile y otras ciudades repartidas por todo el mundo. Las manos, de enormes proporciones, las de Venecia miden seis metros de altura, provocan el original efecto de parecer surgidas directamente de la tierra, y ponen de relieve la influencia que en él tuvieron las esculturas de la Isla de Pascua, que visitó en 1977. En los años noventa Irarrázabal retomó su interés por la figura humana y realizó varias instalaciones de objetos, entre las que destacó los 33 caballos balancín y 44 sillas de niños.



Algunas palabras

“Me gusta eso de crear un objeto concreto, real, tangible. Es que yo vivo pensando y soñando. Eso debo hacerlo materia. Una buena escultura tiene fuerza primitiva, mágica. Lo que busco es la dimensión mágica de la realidad, no lo esotérico.
 Al crear ese objeto intento relacionarme con los demás. Busco crear una contraposición, una metáfora que sorprenda y sugiera. Busco decir algo sobre el sentido de la vida y la muerte, el odio y el sufrimiento, la entrega a los demás: el amor. Para esto no hay lenguaje más apropiado que el del arte.
 La obra de arte encarna, hace vivencia. Intriga, divierte e interesa. Pero finalmente puede llegar a conmover.
 Tal vez sea el cine el arte que más toca al hombre contemporáneo. Pero todas las artes confluyen, se potencian unas a otras.
 El lenguaje del arte es abierto y metafórico: al presentarnos un mundo nos abre a otros. El arte es libre, juguetón, amoroso. Nos quiere maravillar y reencantar”.(Mario Irarrázabal).




La mano del desierto

La "Mano del Desierto" es una escultura a gran escala de una mano ubicada en el Desierto de Atacama, en Chile, a 75 km al sur de la ciudad de Antofagasta, en la Carretera Panamericana.



La escultura de La Mano fue construida a una altitud de 1.100 metros sobre el nivel del mar. Irarrázabal utiliza la figura humana para expresar emociones como la soledad, injusticia, impotencia, el dolor y la tortura.



Su tamaño exagerado del que se dice hacer hincapié en la vulnerabilidad humana y la impotencia. La obra cuenta con una base de hierro y cemento, y se encuentra 11 metros de altura. Financiado por la Corporación Pro Antofagasta, una organización de refuerzo local, la escultura fue inaugurada el 28 de marzo de 1992.



Trayectoria




Mario Irarrázabal realiza una producción escultórica con materiales tales como bronce, aluminio, piedra, madera y hormigón.

A través de un estilo figurativo, el artista comunica sus ideas en torno a una temática cristiana- humanística, de marcada tendencia social: la injusticia, la incomunicación, la soledad, etc., aspectos redimidos siempre por su confianza en el amor.

Tal comunicación es simbólicamente directa, sin hermetismos que confundan el sentido de la expresión; esto no significa que sus obras sean "simples o fáciles", si no que en ellas, la unión de composición formal y tema está tan íntimamente conseguida, que los materiales pueden evidenciar su propia capacidad de autopresentación.

Así mismo, la técnica de la cera perdida le permite al artista elaborar bronces que contienen todo lo que quiera imprimir: gestos, tensiones, texturas, haciendo que dichos elementos se presenten necesarios e inherentes al significado expresado.

Irarrázabal se aleja de los cánones de representación de la figura humana, para concebir seres con miembros alargados y cuerpos abultados, deformaciones que se relacionan con un intenso expresionismo, reforzado por las posturas de las figuras y la dirección de sus cabezas.

Casi todas sus obras son de pequeño formato, pero sin perjuicio de esto, Irarrázabal realiza también obras de grandes dimensiones, siendo las más reconocidas, las manos de cemento que se encuentran en las arenas del desierto chileno, en Punta del Este, en Venecia y Madrid, dispuestas de modo tal que simulan emerger de la tierra.



Estrategia Visual

El artista ha utilizado diversas técnicas y materiales, pero ha dado preferencia al modelado y la fundición de bronce.



La figura humana ha sido una constante en su obra, ofreciendo su particular interpretación y reflejando a través de ellas, su pensamiento cristiano, su sentido social y la sencillez de su opción de vida.



También trabaja obras monumentales a gran escala en ferrocemento, tales como las "manos" emplazadas en Punta del Este, Uruguay, en Madrid, España, en Venecia, Italia y el Desierto de Atacama en Chile.



Biografía

Mario Irarrázabal Covarrubias, escultor. Nació en Santiago, Chile, el 26 de noviembre de 1940.


Desde sus inicios como estudiante, compartió su vocación artística con la social y teológica. Entre los años 1959 y 1964, estudió en el seminario de la Congregación de la Santa Cruz y la Universidad de Notre Dame en los Estados Unidos, donde obtuvo los títulos de Bachiller en Filosofía y Master en Arte.


Más tarde se trasladó a Italia para continuar con sus estudios de Teología en la Universidad Gregoriana de Roma. Desde 1967 a 1968 estudió en Alemania Occidental con el escultor Waldemar Otto, quien marcó sus comienzos como escultor, orientándolo en la línea del expresionismo figurativo alemán.


Desde su regreso a Chile en 1969 se ha dedicado a la escultura, medio que le ha permitido expresar a cabalidad sus inquietudes y sentimientos.


Entre 1972 y 1974 se desempeñó como académico enseñando escultura en la Universidad Católica.


En 1983 fue becado por el gobierno de Alemania para trabajar en el atelier-Haus Worpswede, cerca de Bremen.

Mario Irarrázabal


Un connotado escultor instalador, con una larga trayectoria a nivel nacional  e internacional, que ha recibido entre otras, varias distinciones como: Premio Salón de Valparaíso (1976), Primer Premio IV Concurso Colocadora Nacional de Valores (1978), Premio Concurso Punta del Este, Uruguay (1982), entre otros.

   Conoceremos su vida, sus obras, trayectoria  y aportes de este artista Nacional, oriundo de la ciudad de Santiago de Chile.